Las piezas
El rey, la dama, la torre, el alfil, el caballo y el peón se mueven sobre el tablero cada uno a su modo. Por lo tanto es necesario aprender sus seis maneras distintas de moverse .
Las piezas se dividen, por convención, en blancas y negras. A los jugadores se les conoce como "Blanco" y "Negro", y cada uno comienza el juego con dieciséis piezas de su color. Estos consisten en un rey, una reina, dos torres, dos alfiles, dos caballos y ocho peones.
Nunca llames "fichas" a tus piezas porque se ofenderían gravemente, no estás jugando al parchís.
Cómo mueven
Cada pieza de ajedrez tiene su propio estilo de movimiento. En los diagramas las X marcan las casillas en donde la pieza se puede mover si no hay otras piezas (incluida una pieza propia) que se interpongan en su camino.
Si hay una pieza del adversario en la casilla de destino, la pieza es capturada. La única excepción es el peón, que sólo puede capturar las piezas en diagonal hacia adelante.
Al inicio de la partida las piezas se colocan según el diagrama siguiente
Las piezas se comportan de manera diversa en el tablero, y por eso es fácil comprender que unas son más valiosas que otras.
Una de las primeras cosas que aprende un jugador de ajedrez relativos de las piezas. Para hacer esta simplificación valoramos cada pieza con un número de peones equivalente y esta comparación nos ayuda evaluar la posición y decidir si un cambio de piezas es favorable o no.
Por ejemplo, una torre vale como cuatro o cinco peones y una dama por ocho o nueve, aunque conviene aclarar que el jugador de ajedrez avanzado no anda sumando estos valores durante la partida, sino que los pondera intuitivamente.
Atendiendo a su fuerza, el caballo y el alfil se denominan piezas menores o ligeras, y la torre y la dama, piezas mayores o pesadas. La diferencia de valor entre una pieza y otra se conoce como "calidad", de modo que, si un bando tiene un alfil mientras que el contrario tiene una torre, se dice que el bando fuerte tiene "calidad de ventaja" y si un jugador cambia intencionadamente una de sus torres por un alfil o caballo, se dice que "sacrifica la calidad".
Alcance de las piezas
La fuerza de las piezas tiene que ver con el número de casillas que domina, de su velocidad de desplazamiento y de la capacidad para llegar a unas casillas u otras. Por ejemplo, los peones no pueden retroceder y los alfiles solamente se mueven por casillas de un color.
El alcance de cada pieza depende de su tipo de movimiento y su posición en el tablero, podemos calcular fácilmente cuántas casillas controla cada una desde el centro del tablero (máximo) o desde una esquina (mínimo), suponiendo que el tablero esté despejado.
Esta diferencia entre máximos y mínimos ayuda a explicar por qué unas piezas son más poderosas que otras y, por ejemplo, por qué a los caballos les gusta el centro. Vemos cómo las torres no pierden alcance por su posición y cómo la dama es siempre muy fuerte.
Representación
A lo largo del tiempo se han utilizado muchos modelos de piezas de ajedrez. Esta diversidad es interesante para el coleccionista, pero no todos los diseños son adecuados para jugar, incluso, la falta de familiaridad de un jugador con el conjunto de un oponente podría alterar el resultado de la partida. Por ello, el diseño de Staunton fue seleccionado como el estándar oficial para las piezas de ajedrez de torneo.
Durante más de un siglo y medio, el juego de ajedrez Staunton ha demostrado ser extremadamente popular y es probable que lo siga siendo en el futuro gracias a su gran aceptación porque sus piezas son están bien equilibradas, son sencillas y fácilmente reconocibles.
Juego de piezas de Stauton